Gracias a un Tweett del constitucionalista mexicano Alfonso Herrera (@jAlfonsoHerrera) nos enteramos de la primera Sentencia de Amparo que se produjo en México. Se trata de la Sentencia que Pedro Sámano como encargado de juez realizó el 13 de agosto de 1849 en el Estado de San Luis Potosí, protegiendo los derechos fundamentales de Manuel Verástegui quien había sido condenado a pena de destierro por el Gobernador del Estado, sin haberse dado un juicio previo por parte de una entidad judicial, violándose de esta manera sus garantías y derechos individuales al debido proceso y al juez natural.
Muchos de los constitucionalistas latinoamericanas sabemos más de los fallos de la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos, que de las decisiones judiciales de nuestro propio contexto latinoamericano que dió lugar al nacimiento de acciones tan importantes como al recurso de amparo que tiene origen mexicano y que es el antecedente de nuestra acción de tutela. Enseñamos a nuestros estudiantes fallos como el de Marbury vs. Madison (1803) que fue el origen de la posibilidad de decretar la inconstitucionalidad de una norma, pero también sería bueno contarles del fallo de Sámano en Potosí, o de algo de la historia constitucional colombiana en materia de juicios de constitucionalidad en el siglo XIX. Sería bueno volver a libros como el que Restrepo Piedrahíta publicará sobre el control de constitucionalidad en Colombia y la Nueva Granada, 1821 - 1860 (aquí), que se quedó en el Tomo I, o explorar los fallos de constitucionalidad de la Corte Suprema de Justicia de 1863 a 1886 o de principios del siglo XX. Falta mucho mucho de historia constitucional.
Dos lecturas sobre el Fallo de Pedro Sámano el 13 de agosto de 1849