sábado, 20 de septiembre de 2008

TLC con Estados Unidos



Ya casi me encuentro de vuelta a Colombia, después de esta estancia en Washington D.C. ... No había podido escribir antes por falta de Internet, y también para desconectar un poquito. Por aquí en Washington esta Uribe, pidiéndole a Obama y los demócratas, también a Bush aunque esta ya de salida, de que por favor le aprueben el T.L.C. Obama le contestó que no esta de acuerdo con la aprobación, porque en Colombia se asesinan sindicalistas y que si no hay protección laboral, tampoco hay T.L.C. Es cierto que hay doble moral en la jugada de los demócratas, la violación de los derechos humanos y especialmente los asesinatos selectivos de sindicalistas en Colombia es evidente y no se puede ocultar. Sin embargo, la estrategia de la protección de los derechos humanos también encubre el verdadero interés de Obama, proteger su industria contra los "sweatshops" maquilas y la mano de obra barata. Las Unions o sindicatos en Estados Unidos, es el grupo de presión más grande que tiene la campaña de Obama, recordemos que proviene de Illinois donde son fuertes varios sindicatos, y estos proponen que no se debe abrir el comercio ni implementar tratados. Del mismo modo, este no rotundo de los demócratas al TLC encubre también que en muchos casos los sindicalistas mueren con dineros de empresas multinacionales de origen norteamericano como Chiquita brands, que reconoció financiar y apoyar a los paramilitares durante años en la zona de Urabá, y como sabemos las principales acciones de estos grupos fue el asesinato con lista en mano de sindicalistas, como en los tiempos de las masacres de las bananeras de 1928 descrita por García Márquez en Cien años de Soledad... Esta doble moral de los demócratas en Estados Unidos para oponerse al tratado de libre comercio no debe entristecernos sino alegrarnos. Lo que debería hacer Uribe es mejorar las condiciones de los trabajadores en Colombia, que subsisten en condiciones de trabajo precarias, con sueldos muy bajos y seguridad social en muchos casos burlada con los famosos contratos de outsourcing con cooperativas de trabajo asociado, que alegando que hacen parte del sector solidario violan todas las normas laborales existentes. Del mismo modo debería ocuparse de la protección de los derechos humanos de los sindicalistas, impedir que los niños sigan trabajando en las minas de carbón y de oro, realizar estrategias de comercio justo y de protección al medio ambiente. Del mismo modo nos debemos preparar seriamente para una eventual aprobación del TLC. Qué paso con la industria del pollo preocupada por la entrada masiva de cuartos traseros baratos de Estados Unidos, ¿ya esta preparada?, qué paso con el sector agrícola y manufacturero ¿ya esta preparado para la entrada del TLC? qué paso con la infraestructura vial y portuaria, ¿sigue cerrada la Línea, la entrada al Puerto de Buenaventura, el paso por Puerto Salgar por el supuesto invierno? ¿Nuestras carreteras siguen siendo trochas y camino de mulas?... Mientras Uribe se pasea por Washington buscando demócratas amigos, mientras pagamos los contribuyentes colombianos a los Lobbys carísimos de los Estados Unidos para pedir que nos aprueben el Tratado no estamos haciendo nada para preparar la eventual aprobación que muchos auguran se produzcan después de las elecciones de noviembre en Estados Unidos. Que se empiecen a crear medidas para proteger a los sindicatos pero también regulando y sancionando a las compañías extranjeras que apoyen directa o indirectamente el asesinato de sindicalistas. Hay que prepararse en vez de correr gastando dólares del presupuesto colombiano para ver si Pellosi, los demócratas y Obama nos hacen caso...