Casi pasa desapercibida la información del Diario El Tiempo de la Sentencia del Consejo de Estado (Sección Primera - Magistrado Rafael Ostau de la Font) sobre la píldora del día después. Se trata de una demanda que se hace contra el Invima (Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos) por haberle otorgado a Profamilia el registro sanitario para la importación y venta de productos como el Postinor 2, que contiene levonorgestrel, principal elemento de las píldoras del días después. La pregunta que llegó al tribunal fue si dichas píldoras eran abortivas o anticonceptivas. El Consejo de Estado resolvió que eran anticonceptivas ya que "el proceso de gestación puede llegar a tomar entre 12 y 16 días después de la relación coital", Profamilia defendiendo la píldora como anticonceptiva y no abortiva y expresó que: "la píldora es un tratamiento de emergencia para uso exclusivo dentro de las 72 horas siguientes a la relación sexual no protegida, que previene el embarazo en lugar de interrumpirlo". El Invima informó en el mismo sentido que la píldora: "no es abortiva y por ende no produce la muerte humana". Este fallo respalda lo dicho por la Corte constitucional colombiana en el fallo del aborto y se constituye en una doctrina jurisprudencial reiterada de caracter progresista si se compara con algunos países de la región. Recordemos que el Tribunal Constitucional de Chile el pasado 18 de abril por cinco votos en contra de cuatro declaró la inconstitucionalidad de la píldora por considerarla abortiva. Aquí puede ver dicha Sentencia. La Sentencia chilena ha sido ampliamente criticada y es considerada como un reflejo de que los conservadores y la iglesia católica, "la godarria", respaldada por la dictadura de Pinochet todavía tienen poder en las instituciones judiciales. Ver los blogs paula. cl, funkyoustencil, y quemar las naves para las críticas en Chile. El Espectador informó en su día el malestar de la presidenta Bachelet por el fallo.